Es vital atarse los patines de hockey para que se ajusten correctamente.
Si los patines están demasiado flojos, no les sacarás todo el rendimiento y es posible que te salgan ampollas graves. Y si te aprietan mucho vas a sentir muchas molestias en los pies y no podrás pasar largas horas practicando en pistas de hielo.
Antes de ponerte los patines, hay un par de cosas que debes comprobar primero.
Asegúrate de que tus botas sean del tamaño correcto, ni demasiado grandes ni demasiado pequeñas. Mete el pie en el patín cuando los cordones estén sueltos y desatados. Luego párate junto a una pared y patea la pared ligeramente hasta que los dedos de tus pies toquen la parte delantera del patín. Mira si hay un espacio entre tu talón y el talón de la bota. Si el espacio es demasiado pequeño o no hay espacio, necesitarás un tamaño más grande. Ahora, si hay un pequeño espacio, fíjate si puedes poner los dedos índice y medio detrás del talón. Si logras hacer eso, entonces encajará bien. Si hay demasiado espacio entre los dedos y el talón, deberás optar por una talla más pequeña.
Asegúrate de que los cordones estén completamente aflojados, especialmente la primera vez. De esta manera, puede deslizarse agradable y suavemente sin desgastar demasiado el acolchado interno. Luego saca la lengua para que tengas mucho espacio adentro. Sentado, mete el pie derecho, inclínate y empuja el talón hacia el patín. Podrías patear un poco el talón para asegurarte de llegar hasta la parte trasera de la bota. Luego, si es la primera vez que usas patines nuevos, empieza a atar los cordones desde abajo, porque suelen quedar bastante flojos ahí abajo.
Existen varias técnicas para atar patines de hockey sobre hielo, pero no existe la mejor. Si eres principiante, prueba cada uno hasta que encuentres el que funcione mejor para ti.
Puede elegir cualquier método que funcione para usted, pero recuerde no ser perezoso cuando se trata de seguridad y prevención. Si pisas el hielo y te das cuenta de que tus pies se tambalean, regresa y vuelve a atarlos con más fuerza. Si tienes la sensación de que tus pies se adormecen, debes aflojar las ataduras alrededor de tus tobillos.
Cuando termines de patinar, no te quites los patines y los dejes así. Tómate tu tiempo para aflojarlos completamente y sacar los pies fácilmente. Desate el primer par de ojales y afloje el resto, y su pie saldrá. No pises el talón para sacar el pie. De lo contrario, los patines se desgastarán rápidamente y necesitarás un par nuevo.